Quisiera tener respuestas y más preguntas que hacerte, pero no es así... no siempre hay preguntas ¿no? no siempre necesitas escoger un camino. No siempre tienes que correr con todas tus fuerzas para encontrar alivio.
A veces: sabes en donde estas y hacia donde quieres llegar. Que dejaste atrás y que no volverá. A veces: sólo ese recuerdo de la copa en tu mano queda en la mente y a veces esa copa cae lentamente.
Hoy soy la copa que cae y tira el vino. Sin romperse, sin sentirse mal. Soy esa copa que tiró el vino y alguien recojerá. Soy la copa que estuvo en tu mano y que volverás a tomar algún día.
Hoy me lavaran y guardaran en aquel anaquel. Hasta que tu deseo te arrastre a mí otra vez.... ¿caeré de nuevo de tu mano o me depositaras en tus labios esta vez?
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